¿Quiero tener sexo o no?

Todos los hombres tienen derecho a una vida saludable que los haga sentir bien, independientemente de su estado de VIH.

A la hora de tomar decisiones relacionadas con el sexo, los hombres a los que se les ha diagnosticado VIH no reaccionan todos igual. Mientras que algunos optan por no tener relaciones sexuales por un tiempo, otros eligen tener mucho sexo. Algunos prefieren tener sexo casual únicamente; otros buscan parejas seropositivas.

En definitiva, no hay una sola elección correcta, y las decisiones que tomes pueden cambiar. Muchas personas descubren que ser portadoras de VIH no afecta para nada su vida sexual, mientras que a otros les resulta difícil establecer relaciones sexuales a raíz de los prejuicios que sufren o el miedo que sienten.

Independientemente de cada situación, es importante mantenerse informado sobre el placer, el deseo y el sexo seguro. Si conoces los diferentes aspectos y complejidades del VIH y la sexualidad, es más fácil que logres tener el tipo de relación sexual que buscas, cualquiera sea tu estado de VIH.

Hacen falta dos

No siempre es fácil relajarse y predisponerse al sexo.

Al ser un hombre seropositivo, es probable que muchas veces sientas que eres el único responsable de evitar que el virus del VIH vuelva a transmitirse. Si bien sí eres responsable, no eres el único. Todos los involucrados tienen una responsabilidad individual y colectiva.

Para estar cómodo con las decisiones que tomes, tal vez quieras dedicar un tiempo prudente a reflexionar sobre el tema, por ejemplo, al hablar con amigos, parejas u otros hombres seropositivos.

También puede ser útil consultar con algún asistente social o asesor sociopsicológico. Por ejemplo, algunos asuntos sobre los que podrías conversar son la responsabilidad por las decisiones relacionadas con prácticas sexuales seguras, el tipo de sexo que quieres tener, aquel que disfrutas o el tipo de sexo con el que te sientes cómodo, y si deseas revelar o no tu estado de VIH. Leer sobre todos los problemas de salud relacionados con el sexo no es precisamente algo divertido. En este sitio y en el cuadernillo “VIH + sexo” hemos intentado presentar la información de forma que te sirva para tomar las decisiones más adecuadas en tu caso.

De todas maneras, no podemos anticiparnos y responder a todas las preguntas, sino que debes tomar tus propias decisiones según la información con la que cuentas y de forma tal que te sientas cómodo con lo que decidas hacer. Así podrás sentirte más a gusto con tus parejas y, en definitiva, tener mejores relaciones sexuales.

Relaciones

Las relaciones, una sólida red de apoyo social y el apoyo de los pares.

Estos factores pueden resultar muy importantes para mantener la autoestima alta y la confianza en ti mismo, en especial si te han diagnosticado VIH recientemente. Las relaciones abarcan una variedad de cuestiones, como el afecto, la intimidad, el apoyo y tener a alguien por quien preocuparse y que esta persona, a su vez, se preocupe por ti.

Las relaciones pueden variar en gran medida; para algunos hombres pueden representar lo siguiente:

  • relaciones íntimas a largo plazo solo con una persona;
  • relaciones amorosas con una pareja y actividad sexual con otras;
  • una serie de relaciones sexuales casuales con distintas personas.

Sin importar el estado de VIH, cada relación presenta desafíos, pero también puede resultar muy gratificante. Mientras que para algunos hombres el estado de VIH de su pareja no es importante, para otros puede ser un factor relevante. En el caso de algunas parejas, puede parecer que hay tres integrantes en la relación: tú, él y el VIH.

Si estás en una relación y te diagnostican que eres seropositivo, no presupongas que tu pareja también tiene VIH. La única forma de saber es si tu pareja se hace una prueba.

Una relación en la que una persona es seropositiva y la otra es seronegativa (que a veces se conoce como “relación serodiscordante”) implica su propia serie de desafíos y ansiedades. Al principio, puede ser difícil decidir si revelas o no tu estado de VIH. Esto puede generar diversas inquietudes para ambos. Además, el miedo a transmitir el VIH suele ser una preocupación en algunos casos. Tal vez sea necesario negociar límites en la relación respecto del tipo de sexo que ambos quieren y disfrutan. Lo recomendable es que ambos consideren la profilaxis posexposición (PPE) y la profilaxis preexposición (PPrE), así como los beneficios de ser no detectable.

Algunos hombres portadores de VIH consideran que tener una pareja sexual que también es seropositiva les permite llevar una vida sexual menos angustiante. Tal vez elijas no usar condones porque disfrutas de la intimidad de tener sexo sin protección. Esto conlleva sus propios desafíos, incluidas posibles consecuencias para la salud.

El sexo anónimo o casual es una parte importante de la vida de muchos hombres que tienen relaciones sexuales con otros hombres. Si disfrutas del sexo casual con alguien que no conoces, tal vez sea conveniente acordar límites sexuales antes de participar en cualquier tipo de actividad sexual.

Cualquiera sea la relación sexual que busques, es importante que las decisiones que tomes para tus futuras relaciones no se basen exclusivamente en el VIH. Hay razones mejores para tomar decisiones, como la forma en que te sientes, si funciona para ti, y si es lo que tú realmente quieres y disfrutas.